- Lugares para visitar
Praga: la capital de cuento de hadas de Europa
Ingrese a Praga (Praha) y sentirá como si hubiera entrado en un cuento de hadas. Desde la ribera derecha del río Vltava admire las brillantes vistas del Puente Charles, que une las dos partes de la ciudad, con el Castillo de Praga elevándose por encima del resto de los edificios. Además de absorber el magnífico esplendor visual, hay cafés, bares y restaurantes en abundancia. Praga fue hogar del escritor Franz Kafka, quien vivía en Josefov, el barrio judío. El Museo Franz Kafka, repleto de información, está ubicado en la ciudad vieja y ofrece una mirada sobre la vida y el trabajo del escritor. Qué más hacer en Praga
Se encuentra a unos 20 minutos a pie desde la estación central de trenes sobre la ribera derecha del río. El Museo Franz Kafka se encuentra a 5 minutos a pie de la estación de metro Malostranská.
Cuevas, caminatas, ciclismo
La Kars de Moravia, ubicada al este, incluye alrededor de 1,110 cavernas y desfiladeros. Cuatro de estos fascinantes sistemas de cuevas están abiertos al público para su exploración. Podrá ver las columnas de piedra caliza, un río subterráneo y formaciones de estalactitas. La República Checa es un país lleno de amantes de las caminatas, puede unirse a la población local en una de las muchas sendas a lo largo del país. A lo largo de Praga y hasta Viena (Austria), se extienden 400 kilómetros de fantásticas sendas para caminatas y ciclismo, conocidas como las Rutas Verdes Praga-Viena.
Para llegar al Karsts en Moravia lo mejor es tomar el tren a Blansko y, desde allí, realizar un corto viaje en taxi hasta el sitio.
¡Hogar de pilsners!
Plzeň es una animada ciudad de estudiantes famosa por haber creado la cerveza pilsner, allá por el año 1842. Visite la cervecería Pilsner Urquell para conocer cómo la hacen y, lo que es más importante, para saborear unos vasos refrescantes en el pub Na Spílce dentro de la fábrica. Más tarde puede acercarse a la sede musical favorita de Plzeň, el Anděl Café Music Bar, que por lo general resuena con música de talentosas bandas checas. De día este lugar es un moderno café de encuentros.
La cervecería Pilsner Urquell se encuentra a 10 minutos a pie de la estación central de trenes de Plzeň's y el bar Anděl se encuentra a 15 minutos a pie de la estación.
Sea audaz
Qué mejor forma de conocer un país que desde una altura de 4,000 y bajar volando a casi 300km/h. El parapente es una experiencia que nunca olvidará. Por qué no probarlo en la República Checa. Hay una cantidad de centros para la práctica de parapente a lo largo del país. Si prefiere mantener sus pies firmes sobre la tierra, esto también es posible. Si bien no se comparan con los Alpes, la República Checa tiene montañas que ofrecen buenas condiciones para los deportes de invierno. Las montañas de Krkonoše cuentan con centros turísticos de primer nivel y buenas pistas y sendas para maratones.
El acceso a las montañas de Krkonoše (según dónde vaya) está cubierto por una combinación de tren y autobús.
Encantadoramente checa
La República Checa no fue bendecida con una, ¡sino con dos ciudades de cuento de hadas! Českŷ Krumlov es la segunda ciudad en términos de atracción de turistas del país, y es fácil saber por qué. El río Vltava se abre camino majestuosamente en la pequeña ciudad, dividiéndola mágicamente en dos. Por supuesto, el sorprendente castillo medieval que adorna sus colinas es algo que no se puede dejar de ver. Otra ciudad que vale la pena visitar, aunque su estilo es diferente, es la ciudad spa Mariánské Lázně. Está rodeada de exquisitas montañas verdes y su interior está adornado con elegantes edificios y bellos parques. La atracción más importante es su colección de 100 manantiales.
La mejor forma de llegar a Českŷ Krumlov es tomar el tren a la cercana České Budějovice y luego tomar un autobús a la ciudad. Se puede llegar a Mariánské Lázně en tren, y el centro se encuentra a unos 10 minutos a pie desde allí.