Como toda capital europea cuenta con una gran cantidad de actividades para poder realizar tanto en el día como en la noche.
Pero Dublín por ser una ciudad que tiene un gran número de jóvenes debido a las becas de estudio, generalmente en la noche es cuando más actividades se pueden disfrutar.
Obviamente el recorrido de esta ciudad tiene que empezar con lugares históricos como el Trinity College, una universidad cuya sede fue construida en el año 1592.
Luego de conocer el interior de esta universidad, es tiempo de dispersarse en la calle Grafton a muy pocos metros de allí. Un lugar que cuenta con una gran cantidad de locales comerciales y se pueden encontrar desde músicos hasta la Iglesia de Santa Teresa en una de las calles aledañas.
El Museo Nacional, la Biblioteca Nacional y el Museo heráldico y la oficina genealógica se encuentran cerca para poder visitarlos en una tarde y poder apreciar toda la cultura de esta hermosa ciudad.
Hay que reservarse una tarde indudablemente para poder recorrer la calle Merrion St. Upper donde podemos encontrar el Museo de Historia Natural, El Edificio de Gobierno y la Galería Nacional que son lugares realmente imperdibles.
Después de recorrer todos estos edificios que transmiten la cultura de Dublín, es tiempo de divertirse y conocer una de las mejores noches europeas.
Por eso hay que esperar que se oculte el sol y visitar el temple Bar en el barrio antiguo donde se puede encontrar una gran cantidad de turistas de todas partes del mundo.
Tenemos que detenernos en algún lugar a poder conocer y disfrutar de una cerveza Guinness bien fría y si nos gusta mucho la cerveza no podemos dejar de visitar su fábrica.
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